domingo, 30 de octubre de 2011

Una historia de miedo

Autora: Lucía Díaz

Era una noche de HALLOWEEN, yo estaba sentada en mi sofá cuando de repente... oí un ruido que venía de arriba. Al principio pensé que no era nada, pero a los tres segundos lo volví a oír, y entonces dije en mis pensamientos: ”¿Qué habrá sido eso?”. A continuación me dirigí hacia la escalera con intenciones de subir, cuando di el primer paso subiendo el primer escalón sonó el timbre de mi puerta.
Eran unos niños pidiendo caramelos, entonces abrí la puerta y todos gritaron: ¡TRUCO O TRATO! Yo, muy amable, les di unos pocos de caramelos y se fueron. Volví a intentar subir la escalera, pero de nuevo sonó el timbre de la puerta y eran otros niños con el mismo propósito, y eso mismo me estuvo pasando hasta que se me acabaron los caramelos.

Una vez acabados los caramelos volví a intentar subir las escaleras y al fin pude hacerlo. ”Aleluya”, pensé, “al fin he podido llegar arriba”. Al llegar me di cuenta de que el ruido venía de mi habitación, no sabía si asustarme o emocionarme. Al principio me asusté, pero luego pensé que si no entraba nunca lo sabría, así que entré. Cuando entré no vi nada, solamente una nota y la ventana abierta, luego abrí la nota que ponía: “Hoy es el día, hoy es la noche, este lugar está encantado y no es muy fácil de encontrar, cuando llegues, busca a la adivina, y pregunta por Antonia la embrujadora,y... ya verás".

Al principio pensé que sería una broma pero aún así seguí las instrucciones. Tenía que descifrar el acertijo, pensé por dónde se escondía el Sol y por dónde salía la Luna, como era en un mismo sitio dije: "¡Claro en el Castillo encantado del viejo señor dueño del pueblo!, que se encuentra en la cima de la colina". ¡Ya sabía dónde ir!
Me dirigí al Castillo, que por lo abandonado que estaba supuse que no había nadie, pero aún así llamé a la puerta, no me respondió nadie pero como la puerta estaba abierta, entré. Dentro no se oía ni un solo ruido, pero del salón de baile venía el sonido de un piano. Tenía miedo, pero decidí entrar. Cuando entré había una anciana con unas uñas muy largas tocando el piano y me dijo:

- Hola jovencita, vienes a verme ¿verdad?
Yo le respondí:
- Depende, si eres adivina...
Ella me respondió:
-Sí, yo soy adivina y seguramente vendrás a preguntarme por Antonia, ¿estoy en lo cierto?
Yo le dije:
- Sí, ¿pero me podrías decir dónde está?
Ella me dijo que se encontraba en la caseta al lado del río. Yo le di las gracias y me fui corriendo al río.

Allí en la caseta había otra anciana, a la que le pregunté:
- ¿Usted es Antonia?
Ella me dijo:
- Pues claro, la adivina te ha dicho que estoy aquí, ¿no?
Yo asentí con la cabeza. Ella me explicó:
- Seguramente vendrás por la nota de tu habitación, pues bueno, para encontrar a quien te ha dejado la nota tienes que seguir el callejón que está al lado del Ayuntamiento.

Yo le di las gracias y me fui. Cuando llegué al final del callejón estuve esperando, después de media hora llegó un fantasma blanco con ojos verdes, una boca amarilla y una bola de preso atada a la cola. El fantasma me dijo:
- Me llamo Fanti, y fui yo quien te dejó la nota, pero lo hice porque necesito tu ayuda.
Yo, aunque fuera raro, le pregunté:
- ¿A qué quieres que te ayude?
Fanti me respondió:
- A quitarme esta bola de la cola.
Yo le dije que la ayudaría pero antes le pregunté dos cosas:
- ¿Pero quién te ha atado la bola?- y - ¿por qué no en vez de armar todo este lío no has ido directamente a mi casa y me lo has pedido rápidamente?
El me respondió:
- El que me ató la bola fue el Alcalde, y no he ido directamente hacia ti porque pensé que no me creerías.
Yo le dije que le ayudaría.

Luego, me dirigí con Fanti hacia el Ayuntamiento. Mientras llegábamos me lo contó todo: "Cuando vivía en este pueblo, una vez robaron el dinero de los impuestos que pagábamos y el Alcalde me acusó a mí, me condenaron y me mataron. Unos años después fui atrapado con esta bola de preso, y hasta que alguien no demuestre quién fue el verdadero ladrón, o sea el Alcalde, no me liberaré".
Cuando llegamos al Ayuntamiento fuimos a ver al Alcalde y se lo conté todo. Él no me quiso creer, pero cuando apareció Fanti le dio tanto miedo que al final le obligó a confesarlo todo delante de todo el pueblo. Al día siguiente lo confesó todo y entonces le sentenciaron a 100 años de cárcel.

El fantasma me dio las gracias y cuando se disponía a volar se le desató la bola. Yo me fui muy alegre a mi casa y pensé: “Ha sido el mejor Halloween de toda mi vida”.

Qué miedo

Autora: Belén Barranquero

Erase una vez una niña que se llamaba Keles. Estaba en la cocina viendo la tele y no se tomaba el desayuno. Entró su mamá y le dijo "Tómate el chocolate con leche" y Keles dijo "No quiero, a mí me gusta con cereales".

Llega el papá andando de espaldas y la niña dice "Papá, ¿por qué andas así?". A lo que el papá responde "¿Quieres que me de la vuelta?". La niña responde que sí y el padre responde "Pues me la doy". Se da la vuelta y dice "¡Buuuuuuu!". Keles y la madre gritan asustadas "¡Ah, ah, ah, ah!".

No era su papá, sino el espíritu, porque había entrado un fantasma a la casa con un cuchillo y lo había matado. La madre y Keles salieron corriendo pero la madre se cayó y el fantasma la alcanzó. Keles siguió corriendo a toda pastilla, se cae al suelo ¡puf!, grita y se despierta. ¡Todo había sido un sueño!

Mr. Cómic







sábado, 29 de octubre de 2011

Halloween 2011: vídeos

Enhorabuena a los padres y madres por la que montaron. Estuvo magnífico.

Aquí les vemos bailando terroríficamente.


El Túnel del Terror no se ve mucho pero oírse, bien que se oye.


Después en la clase.

Un matrimonio (sin problemas)

Autora: Ana Gómez

En los montes Pirineos, Álvaro y su mujer, llamada Lourdes, se pusieron a escalar. Eran grandes aventureros que querían ir a París de esa forma. No sabían lo que les esperaba (o tal vez sí).

- Será la mejor luna de miel del mundo, querida.
- No estoy segura, podría llover y resbalarnos sobre la nieve. O algo peor...
- No te preocupes, si pasa algo estaremos juntos y si morimos moriremos juntos.

Y siguieron escalando como si les fuera la vida en ello.
(Sinceramente, podrían perder la vida en ello)

- Dicen que “el yeti” de este monte está en la cima.
- No me asustes Álvaro, no te lo tomes a guasa, que podríamos morir.
- Cuando lleguemos a París, todo se habrá acabado.
- Está bien, pero date prisa, tengo frío y hambre.
- Ya llegamos, ya llegamos. Cuando anochezca montaremos la tienda.

A los tres días, por la mañana desayunando tranquilamente...
- Dame la mermelada y la sal.
- Intentaré encontrarla, no veo muy bien...
- Tú coge la sal, yo la mermelada.
- He dicho que lo intentaré
Oliendo:
- Esto no es sal, ¡es pimienta¡ Soy alérgico a la, la, la,... ¡Achiiisss¡
- ¡Cuidado, la nieve!
Los dos:
- ¡Noooooooooooooo¡

Y murieron asfixiados.

La habitación encantada

Autor: Diego Ruano

Era una habitación grande, bonita y estable, pero había una cosa mala, ¡un agujero detrás del armario!, por el que un fantasma y Frankenstein iban todas las noches a asustar a una niña que vivía allí. La niña se asustaba y se iba con su madre a dormir. Por la mañana tenía mucho miedo pero no aparecía nadie.
La niña todas las noches le decía a su madre: “¡Mamá hay un fantasma y Frankenstein en mi habitación!”, y cuando la madre fue a su habitación, ¿sabes qué pasó? ¡que se habían escondido debajo de su cama!
La niña estuvo buscando por dónde entraban los monstruos y se dio cuenta de que había un agujero detrás del armario. Ella tenía emoción por saber lo que había detrás del agujero y...¿sabes lo que había detrás del agujero?, había muchos monstruos: fantasmas, momias, brujas, esqueletos...
Ella se metió en el agujero y… ¡se asustó! porque no encontraba la salida y salió corriendo.


Al final se tuvieron que cambiar de casa porque la madre estaba cansada de la pesadilla que estaban viviendo, y desde ese día la familia estuvo a gusto para toda la vida.

lunes, 24 de octubre de 2011

Matemáticas: Unidad 3


Dos asesinos sueltos

Autor: Pablo Riquelme

Ayer salieron de la cárcel dos asesinos que habían matado a noventa personas en un solo día.
Uno de ellos es Jason, un hombre con una careta de portero de hockey, con la que no se le veía la cara y que tenía una motosierra. El otro es Fredy, un tipo con la cara quemada y cuchillas en las manos; ¿y sabéis cómo mataba?: cuando la gente se dormía y tenía pesadillas, Fredy se metía en sus sueños y los asesinaba y luego en la vida real estaban muertos de verdad.

Al cabo de un rato, Jason le dijo a Fredy:
-¿Por qué no matamos a alguien?
-¡Vale!- dijo Fredy - yo a uno en las pesadillas y tú a otro en la vida real.
Al cabo de un minuto, Fredy encontró a un niño dormido y le dijo en el sueño:
-Hola, ¿te gusta jugar al escondite?
-Sí- dijo el niño.
-Pues juguemos, cuento yo – dijo Fredy – uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve y diez. El que no se ha escondido tiempo ha tenido...
Al niño no le dio tiempo a esconderse.
-¡Aaaaaaaahhhhhh!- gritó el niño mientras Fredy lo acuchillaba.
- Si, por fin lo maté- dijo Fredy.
Y Jason sólo hizo:
-Hola niño, rrrrrraaaaaammmm- el sonido de la motosierra mientras mataba a el niño.

Y así seguirán mucho tiempo.
Quizás el siguiente seas ¡TÚ!

Halloween Town

Autora: Clara Peral

Hace mucho tiempo, hubo una gran guerra. Pero muchos años después hubo paz.
Un reino tuvo dos nuevos habitantes, Diana y su hermana Aurora. Ellas tenían poderes.

- ¡Diana!, trae unas cuantas setas y una rana.
- Jooooo, no es justo, siempre voy yo, por cierto ¿qué estás preparando?.
- Puessssss es un secreto.
- Dímelo por favor.
- Vale, pero antes tráeme lo que te he pedido.
- Ok .

Diana fue al bosque y, para que no le ocurriera nada, Aurora la siguió. De pronto encontró una puerta dibujada en un árbol, tenía forma de... fantasma, la joven dio una vuelta al pomo pero... se tropezó y se cayó dentro. Su hermana corriendo se metió también.

Más tarde despertaron en un lugar muy extraño.
- ¿Dónde estamos, Aurora?...Espera...¡Aurora, me has seguido!.
- Era por tu seguridad, aún no dominas bien la escoba.
- Ya pero...

Las dos miraron a su alrededor y...
- ¡Vaya, qué miedo da esto! ¿no?.
- Y que lo digas.

Las dos chicas descubrieron un cartel que ponía “Halloween Town”.
- Venga, vamos, tendremos que buscar una posada, está chispeando.
- Vale...

Por las calles no había ni un alma.
- Vosotras, venid conmigo.
- ¿Quiénes? ¿Nosotras?.
- Si.
- Por fin después de tanto tiempo.
- ¿Quién eres?.
- Soy la mensajera real.
- Vale, soy Aurora y ella es mi hermana Diana.
- Seguidme rápido y que no os vea nadie.
- Vale.

Las dos llegaron junto con la mensajera a un castillo similar al del Conde Drácula y por supuesto, muy espeluznante.

- Señora, aquí están sanas y salvas.
- Oh, estáis tan... tan... mayores y hermosas.
- ¿Qué?
- Claro... Soy Miranda, Reina de los muertos.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh
- O también podéis llamarme mamá.
- ¿Cómo? Papá nos dijo que nuestra madre biológica murió.
- Así es, fueron las sombras, seguramente no os habrá explicado nada sobre este tema ¿no?
- Emm..., no
- Muy bien. Hace mucho tiempo este reino era feliz y hermoso y entonces aparecísteis vosotras pero... la primera noche, cuando miré por la ventana, descubrí que nos observaban unas sombras. Ellas me absorbieron el alma y yo os llevé a otro mundo para que no os pasara esto.
- Qué buena eres, mamá.
- Si tú lo dices... Ohhh me siento débil. Si un humano no recupera su alma el 31 de octubre, su alma y su cuerpo se debilitan.
- No lo vamos a permitir.
- Eso.
- Gracias niñas, cuidado y llevaos estas armas. Son: pistolas de rayos, estacas especiales para las sombras y la bolsa de luz.
- Gracias mamá, te queremos.
- Cuidado con las sombras.

Las niñas llegaron a una gruta. Dentro había... un monstruo hecho de sombras. Lanzaron de todo pero fue inútil.

-Lo contrario de la oscuridad es la luz, piensa en la luz.
- No funciona porque lo contrario no es la luz es...es...el amor.
- ¿A quien quieres más?.
- A mamá.
- Yo a papá.
- A mi hermana.
- Noooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo ¿cómo es posible? sólo sois niñas.
- Pero el amor lo puede TODO.

Y así fue como vencieron a la oscuridad y como encontraron a su madre.

La terroparty

Autor: Manuel Castillo

Un día El Conde Drácula decidió celebrar una fiesta de Halloween.
Primero, se puso a escribir terroríficamente las invitaciones.
Invitó a: Frankenstein, a La Muerte, al Infierno...
Después se puso a hacer la tarta de sangre con chocolate chispeante.
- ¡Mmmm!¡Mi preferida!
A continuación puso los adornos: como los murciélagos, calabazas…
Llegó la hora de la “terroparty”.
Empezó a venir la gente con su mejor traje, a mí me pareció el mejor el del Fantasma Gris, porque llevaba un collar de persona asustada, me encantan.
A las 2 horas se terminó la fiesta. Estuvo genial.



La momia

Autor: Pepe Moreno

Había una pareja a la que le gustaba muchísimo visitar iglesias antiguas para descubrir los tesoros que había en ellas. Hasta que un día encontraron una maldición escrita en un ataúd y al abrirlo salió una momia malvada. Los dos salieron de la iglesia asustados gritando: “¡RÁPIDO, ESCONDEOS, QUE VIENE UNA MOMIA ASESINA!”

Siguieron corriendo por las calles hasta que llegaron a un castillo abandonado y oscuro, entraron y se encontraron con un salón muy grande y lleno de armaduras y cabezas de animales disecados por todas partes. No tuvieron otra opción que luchar, pero a la momia no le afectaba ni los palos, ni las pistolas, ni tampoco las espadas. Por suerte encontraron una estatua pequeña en la que podía leerse: “ QUIEN A LA MOMIA QUIERA MATAR, ESTA ESTATUA DEBE USAR”.

Vieron sobre la chimenea un hueco hecho en la pared que tenía la misma forma y tamaño que la estatua, así que colocaron la pequeña estatua en el hueco y empujaron hacia adentro. En ese mismo momento surgió de la chimenea un tornado que absorbió a la momia maléfica.

sábado, 22 de octubre de 2011

Conde Poesía, Candi-Candi y Marcus

Autora: Carmen Ariza

Érase una vez una niña llamada Sara. Ella no creía en monstruos ni en fantasmas. Un día como cualquier otro fue al colegio, sin darse cuenta de que era 31 de octubre. Sus compañeros de clase intentaron asustarla diciendo que como no creía en fantasmas vendrían a por ella. A ella no le asustaba, hoy tenia planeado quedarse en casa estudiando y no pedir caramelos, ni trucos y mucho menos tratos. Su madre intentaba que se disfrazara y que se divirtiera pero ella...bueno...ella era...``distinta´´. No le gustaban todas esas tonterias de disfrazarse y pedir caramelos, ella se preguntaba que por qué ese día y no cualquier otro, como si el 21 de junio se disfrazara y empezara a pedir caramelos.

Al terminar el colegio volvía a casa como siempre, pero en el camino notó como si la observaran. Miró hacia atrás y nada. Siguió hacia delante pero harta de esa sensación volvió a mirar. Pero esta vez encontró una sorpresa: un ``vampiro´´ se dirigía hacia ella. Sara, pensando que era un amigo suyo disfrazado intentando asustara, le dijo:
-No me asustas ¡déjame ya.!
-¿Ehhhh?- respondió el vampiro.
- No sé qué dices,
yo solo intento ser feliz
Y comer perdices.
-Venga, puedes dejarlo, no me asustas.
-No intento asustarte, sólo ....
como una amiga tenerte .
Sara se quedó un poco asustada:
-Si .....si..... no eres ..... entonces eres.... un .... vampiro de verdad.
-Sí, al fin lo comprendes, pero no te asustes, no.. eso ni lo pienses.
-Bueno, no todos los días se conoce un vampiro .....¿y qué quieres?
-No pido nada, sólo un poco de amistad, esa cosa tan sagrada.
-Bueno, a mi casa no puedes ir, mi madre se asustaría pero.......¿qué tal a la casa del árbol?

Así fue. Sara iba camino de la casa del árbol con el Conde y a mitad de camino se encontraron con una brujita sentada llorando. Sara le preguntó:
-¿Qué...qué te pasa?
-Que (buaa buaa) se me ha perdido la escoba.
-Y ¿por qué no compras una nueva?- propuso Sara.
-¿Bromeas? Una escoba no se puede cambiar así como así.
-¿Y por qué no aguantas sin escoba?
-Es que una bruja sin escoba es como ... un sandwich sin pan...
-Bueno, ahora que lo pienso nunca he visto a una bruja sin escoba ...

Sara decidió llevarla a la casa-árbol pero justo una manzana antes apareció un fantasma:
-Hola- dijo Sara
-Cómo que hola ...¿no te asustas?
-La verdad es que no. Ya llevo un vampiro y una bruja...así que...
-Y ¿a dónde vais?-
-A la casa-árbol ¿vienes?
-Síiiiii

Y así fue. Al llegar a la casa-árbol muy contenta con sus invitados, Sara les dijo que si les apetecía una bebida. Todos aceptaron contentos. Luego Sara preguntó: "¿y cómo os llamáis?". Respondieron:
-Yo, Conde Poesía, soy feliz y me encanta la hostelería.
-Yo, Candi-Candi y soy muy sensible....
-Yo, Marcus, me encantan las bromas jiji...

Sara les dijo a todos :
-Mañana ¿qué haremos?
Marcus respondió:
-No habrá mañana.... sólo podemos salir en Halloween.
-Pero no te preocupes, todos los 31 de octubre vendremos.
-Vale - dijo Sara apenada- ¿me lo prometéis?
-Sí- dijeron a coro.

Y así fue. Todos los treinta y uno de octubre celebran una pequeña fiesta.

La plaza encantada

Autora: María Cortés

En todas las plazas hay algún defecto pero esta es especial.
En ella habitan zombis , espíritus, vampiros y el peor de todos,
el ronco. Todas las noches se reunen y forman grupos para gastar bromas , las piensan entre todos y al siguiente día las llevan a cabo.
Un día uno de los grupos decidió gastar la broma suprema , y su objetivo serìa el ronco.

Al día siguiente cuando la llevaron a cabo una de las vecinas, Belén, se despertó y decidió llamar a su amiga Lucía , pero no pudieron encontrarla por lo que fueron a llamar a Marta , y ya que esta perdió todo el sueño que tenía, se bajó y cuando llegó vieron a todos los espíritus gastándole la broma al ronco.
La broma consistía en cambiar a su mujer por un zombi. Cuando el ronco se despertó vió a su mujer y gritó
– AHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!!!

Entonces Belén estornudó
-Atchíííííííííííísssssss!!!!!!

Y le escucharon los espíritus que había por allí ante lo que decidieron desaparecer por arte de magia y cuando despertaron estaban de nuevo todos en sus camas¡Todo había sido un sueño!

Y se acordaron de eso toda su vida.

Halloween

Autor: Adrián Soto

Ha llegado la noche de Halloween, hemos quedado en el parque entre ocho y diez niños.
Al final éramos 9 niños. En la primera casa nos dieron gominolas, en la segunda casa nos dieron caramelos, en la tercera chocolatinas, en la cuarta nos dieron chicles y en la quinta nos dieron un susto tremendo: el dueño estaba disfrazado de vampiro.

Al día siguiente nos reunimos todos y éramos ocho, faltaba uno y nadie sabia quién era. Después nos repartimos lo que habíamos recogido pero no apareció el niño que faltaba y empezamos a pensar que fue un espíritu el que nos acompañó esa noche.

domingo, 16 de octubre de 2011

Lengua: Unidad 3

En este tema trabajaremos, entre otras cosas:

1. Palabras antónimas y algunos prefijos con los que se forman.

Actividades de más fácil a más difícil:









2- La tilde en el diptongo







3- La oración: sujeto y predicado




martes, 11 de octubre de 2011

Canción en catalán



(pincha en los personajes para verlos)


QUALSEVOL NIT
POT SORTIR EL SOL


Fa una nit clara i tranquilla,
hi ha la lluna que fa llum,
els convidats van arribant
i van omplint tota la casa
de colors i de perfums.

Heus aquí a Blancaneus,
en Pulgarcito, els Tres Porquets,
el gos Snoopy
i el seu secretari Emili
,
i en Simbad,
Ali Babà i en Gulliver.

Oh, benvinguts, passeu, passeu!
de les tristors en farem fum.
La casa meva és casa vostra
si és que hi ha ... casa es d´algú.

Hola Jaimito i Doña Urraca,
i en Carpanta i Barba Azul,
i Frankenstein i l´Home Llop,
i el Compte Dràcula i Tarzan,
la mona Xita
i Peter Pan.

La senyoreta Marieta de l’ull viu
ve amb un soldat,
els Reis d’Orient, Papà Noël,
el Pato Donald i en Pasqual,
la Pepa Maca i Superman.

Bona nit senyor King Kong,
senyor Asterix i en Taxi Key,
Roberto Alcàzar i Pedrín,
l´Home del Sac i en Patufet,
senyor Charlot, senyor Obèlix.

En Pinotxo ve amb la Monyos
agafada del bracet,
hi ha la dona que ven globus,
la família Ulises,
i el Capitàn Trueno amb patinet.

...............

I a les dotze han arribat,
la Fada Bona i Ventafocs,
en Tom i Jerry,
la Bruixa Calixta,
Bamby i Moby Dick,
i l'emperadriu Sissi.

I Mortadelo i Filemón
i Guillem Brown i Guillem Tell,
la Caputxeta Vermelleta,
el Llop Ferotge
i el Caganer,
en Cocoliso i en Popei.

Oh, benvinguts, passeu, passeu!
Ara ja no hi falta ningú,
o potser sí...
ja me n´adono
que tan sols ... hi faltes tu.

També pots venir si vols,
t'esperem, hi ha lloc per tots.
El temps no compta, ni l´espai.

Qualsevol nit pot sortir el sol.

(Jaume Sisa)


CUALQUIER NOCHE
PUEDE SALIR EL SOL


Hace una noche clara y tranquila,
está la Luna que ilumina,
los invitados van llegando
y van llenando toda la casa
de colores y de perfumes.

He aquí a Blancanieves,
a Pulgarcito, los Tres Cerditos,
el perro Snoopy,
y su secretario Emilio,
y Simbad,
Ali Babá y Gulliver.

¡Oh, bienvenidos, pasad, pasad!
de las tristezas haremos humo.
Mi casa es vuestra casa
si es que hay ... casa de alguien.

Hola Jaimito y doña Urraca,
y Carpanta y Barba Azul,
y Frankenstein y el Hombre Lobo,
y el conde Drácula y Tarzán,
la mona Chita y Peter Pan.

La señorita Marieta del ojo vivo
viene con un soldado,
los Reyes de Oriente, Papá Noel,
el pato Donald y Pascual,
la Pepa Maca y Superman.

Buenas noches señor King Kong,
señor Asterix y Taxi Key,
Roberto Alcázar y Pedrín,
el Hombre del Saco y Patufet,
señor Charlot, señor Obélix.

Pinocho viene con la Moños
agarrada del brazo,
está la mujer que vende globos,
la familia Ulises,
y el Capitán Trueno con patinete.

.............

Y a las doce han llegado
el Hada Buena y Cenicienta,
Tom y Jerry,
la Bruja Calixta,
Bambi y Moby Dick,
y la Emperatriz Sissi.

Y Mortadelo y Filemón,
y Guillermo Brown, y Guillermo Tell,
Caperucita Roja,
el Lobo Feroz y el ‘Caganer’,
Cocoliso y Popeye.

¡Oh, bienvenidos, pasad, pasad!
Ahora ya no falta nadie,
o quizás sí...
ya me doy cuenta
que tan sólo ... faltas tú.

También puedes venir si quieres,
te esparamos, hay sitio para todos.
El tiempo no cuenta, ni el espacio.

Cualquier noche puede salir el sol.

(Jaume Sisa)